¿Tiene
el cristiano responsabilidad más importante que la de vivir y difundir el evangelio? La realidad
es que ninguna otra cosa bajo el cielo es más importante que esto.
Los evangelios traen propósito, gozo, paz y lo más importante, nos dan entendimiento
y una imagen más clara de lo que Jesús hizo por nosotros en la cruz. A través de su
victoria, El nos ofrece el regalo de la vida eterna.
Cada palabra de Dios satisface nuestras necesidades
y nos guía para que vivamos una vida extraordinaria aquí en la tierra, brillando, alabando y glorificando en
nombre del Señor de nuestras vidas, Jesucristo.
Sabes…en la Biblia dice 365 veces,
“No temas”. ¡Una vez por cada día del año! ¿Te
parece una coincidencia? Claro que no. El Señor sabia que necesitábamos
escuchar esto cada día, para acordarnos que El esta a nuestro lado en cada situación, en cada paso que demos
en nuestro caminar en la vida cristiana. Así, de esta forma, pueda cumplirse el asombroso y sublime
propósito que El tiene para nuestras vidas. Ser un cristiano significa que debemos vivir como Cristo
lo hizo. Esto conlleva fe, compasión, valor y amor.
Este es un llamado para todo
aquel que desee entregar el 100% de su vida a Jesucristo, el Hijo de Dios. El no merece menos.
A través de esta entrega, experimentaras la maravillosa transformación que solo Dios puede hacer, por
medio de su Hijo Jesús, en tu vida. El desea bendecirte de forma extraordinaria. ¿Se
lo permitirás?
“Porque de tal manera amó
Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga
vida eterna.”
(Juan 3:16)